lunes, 20 de enero de 2025

El poder del adiós

Si hubiera sabido que aquella iba a ser la última risa, aún estaría diciéndote tonterías.
Si hubiera sabido que aquella iba a ser nuestra última comida juntas,  te hubiera echado ese fisquito de sal que tanto me pedías. 
Si hubiera sabido que ese iba a ser nuestro último café,  hubiera tardado la vida entera en dar el último sorbo. 
Si hubiera sabido que ese iba a ser nuestro último paseito bajo el sol, te hubiera llevado hasta el fin del mundo
Pero la vida, ni avisa ni garantiza. Sólo puedes confiar, recordar y amar. Como tu me has amado cada día de tu vida.